Con bastones en mano y los sentidos despiertos, la marcha nórdica es accesible para todos los niveles y ofrece numerosos beneficios. Además de mejorar la condición física y fortalecer la musculatura, es suave para las articulaciones y puede practicarse en familia.
El aroma relajante de los pinos contribuye al efecto profundamente relajante de esta experiencia inmersiva.
Practicar la marcha nórdica junto al océano combina los beneficios del ejercicio físico con las propiedades revitalizantes del entorno marino. La ligera resistencia de la arena o de los senderos costeros añade un desafío adicional a tu entrenamiento. Además, el aire marino, rico en oxígeno e iones negativos, proporciona una maravillosa sensación de revitalización.
Caminar a lo largo de las olas con vistas panorámicas al océano: un momento inolvidable.
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